1) Reducir costos sin comprometer la calidad
Los adolescentes con los que trabajamos dicen que reducir el costo de las actividades los ayudará a ser más activos. Recomiendan que debería haber más actividades gratuitas, aunque los adolescentes saben que a medida que bajan los precios, también baja la calidad de la actividad/lugar. Una forma de lidiar con esto es ofrecer actividades que no requieran un entrenador o árbitro, pero que permitan a los adolescentes jugar libremente, creando sus propios juegos y reglas en un lugar seguro.
2) Haz que las actividades sean locales
Eliminar la necesidad de movimiento facilitará que los adolescentes accedan a la actividad física. Los adolescentes con los que trabajamos dijeron que estarían encantados de organizar sus propias actividades si tuvieran instalaciones cerca de donde vivían. No mencionan la necesidad de entrenamiento, solo espacio para jugar. Todo lo que quieren cerca es un espacio para participar en su deporte favorito, no regulado y no competitivo.
3) Mejorar las instalaciones existentes
Todos los jóvenes dijeron que sus instalaciones locales necesitaban mejoras. Los espacios, como los parques locales, se han deteriorado y el equipo se ha dañado. El mantenimiento de las instalaciones del ayuntamiento frustraba a los adolescentes. Dicen que los consejos deberían hacer más para mantener y mejorar las instalaciones locales.
4) Haga que las actividades sean más específicas para los adolescentes
Los jóvenes con los que hablamos también dijeron que hay pocas cosas que inviten específicamente a los adolescentes a compartir u ofrecer las cosas adecuadas para ellos. Creen que los servicios administrados por la junta ignoran específicamente su grupo de edad y sugieren soluciones como eliminar las restricciones de edad en ciertas clases de acondicionamiento físico, como Zumba y spinning.
5) Ofrecer a los adolescentes una opción de actividad
Al igual que otros, los adolescentes no quieren limitarse a algunos deportes pequeños.Las actividades que recomiendan son menos tradicionales, como driblar, trotar o ir al gimnasio. Pero no es solo un problema con los servicios locales, los adolescentes también dicen que las escuelas carecen de opciones. Los adolescentes se quejan de verse obligados a practicar el mismo deporte año tras año. Las niñas hablan más que los niños sobre la falta de opciones, lo que indica que se alejaron de los deportes escolares.
6) Ofrecer actividades que les gusten a los adolescentes
Los adolescentes con los que hablamos dijeron que si no les gustaba lo que se ofrecía, no lo harían y preferirían estar inactivos. Cuando se habla de diferentes actividades, los adolescentes dicen que es más probable que sean positivos si pueden hacer actividades que aman.
Las jóvenes con las que hablamos dijeron que disfrutaban del parque acuático local, con sus toboganes y máquinas de olas, y el parque de trampolines porque “era divertido”. No parece un ejercicio tradicional, pero la clave aquí es hacer que los adolescentes se muevan, ya sea que tradicionalmente lo consideremos como “ejercicio” o no.