En esta plática dirigida por Jürgen Klaric, nos relata sus experiencias a lo largo de 17 años dentro del sistema educativo. Nos menciona que la escuela y el sistema educativo se han mantenido de manera casi igual a lo largo de todo este tiempo, no obstante el evidente cambio que podemos notar en el mundo a lo largo de este mismo período de tiempo, nos contrasta esta falta de evolución dentro del sistema educativo con todos los cambios en la vida humana e históricos que se han dado desde incluso la propia creación del sistema educativo. Jürgen nos menciona que si bien en la escuela se nos inculcan aquellos aprendizajes necesarios para la vida resulta paradójico que a pesar de que el sistema educativo nos señala estos como necesarios, no resultan ser los más esenciales, por ejemplo, se nos enseña la geografía mundial y álgebra, no obstante el sistema educativo llega a omitir conocimientos de la vida tan sencillos como la buena alimentación, finanzas personales, o incluso algo tan simple como el manejo de emociones y la búsqueda de la felicidad.
Jürgen continua esta crítica al sistema educativo tradicional abordándolo también desde la experiencia de su hija, la cual nos menciona comienza a tener malestares estomacales muy fuertes en el colegio, tras muchos doctores, mucho preocupación y mucho tiempo invertido, tratando de dar con aquello que afligía a su hija, se llegó a la conclusión de que su malestar era de carácter totalmente psicológico; tras indagar dentro del ámbito escolar qué es lo que afligía a la hija de Jürgen se pudo concluir que era un gran estrés el cual ella sentía al ser catalogada como una persona poco capaz académicamente, al no ser ella muy buena en determinadas materias tales como matemáticas, a pesar de tener un gran talento para otras ramas de estudio como en este caso en concreto lo era el arte.
La siguiente pregunta planteada en esta conferencia, sería: ¿Qué hace un sistema educativo eficiente?, para muchos la prueba PISA resulta el parámetro indicado para responder esta pregunta, sin embargo, Jürgen nos plantea que al solo evaluar matemáticas, lectura y comprensión regresamos al mismo problema de origen, incluso esto lo podemos ver ejemplificado en el gran estrés que existe en las comunidades educativas de los países considerados como sobresalientes en esta prueba, los cuales llegan a tener tendencias suicidas muy elevadas entre sus estudiantes. Jürgen nos mencionó que esto lo pudo notar de manera muy latente en países como Corea del Sur y Singapur, donde en los dormitorios de los estudiantes se fijan barrotes en las ventanas para evitar que tengan conductas que atenten contra su integridad. A grandes rasgos podemos decir que Jürgen critica fuertemente el sistema educativo tradicional y su medición en números por medio de calificaciones para asignar qué alumnos son mejores y qué alumnos son peores, recuerda a los papás a nunca reducir a sus hijos únicamente a sus calificaciones y también nos recuerda que ultimadamente las personas con las mejores calificaciones no siempre son las más felices o exitosas en la vida. Jürgen termina su platica refiriéndose a la generación actual, a los jóvenes de hoy, como la generación del cambio, invitando a ellos a que realicen un cambio en el ya obsoleto sistema educativo.
